Cueva del Gato - Benaoján, Málaga

JOSE L. M.

Forma parte del sistema espeleológico Hundidero~Gato considerado el más grande Andalucia y entre los primeros de España. Digamos que es la salida porque mana el agua del río Guadares para desembocar en el río Guadiaro y esto es posible porque se encuentra a mucha menor altura que la cueva del Hundidero. Aparte es mucho más accesible y las zonas próximas estân bien acondicionadas en el tema de restauración y alojamiento. También suma la proximidad de la población de Benaojan. Está declarado Bien de interés cultural desde 1985 y Monumento natural de Andalucía desde 2011. Como curiosidad la denominación de gato es porque evoca la cabeza de un gato

Irene A.

He venido en enero y la zona está súper tranquila,hay un parking con acceso a la zona justo al lado de la carretera por sólo 1€ el día.
Hay que tener cuidado con el GPS porque nos llevó por un camino de infarto,menos mal a un lugareño que nos volvió a indicar.
Lugar precioso.

Paki M.

Fui a pasar el día con mi hija y unos amigos. El lugar realmente es muy bonito, el agua limpia y transparente aunque coincido con otros comentarios al decir que está súper fría, pero aún así nos dimos unos baños. La única pega es que hay demasiada gente a mí gusto.

miguel S.

Pequeña poza formada por la salida de un manantial de dicha cueva.
El manantial tiene bastante agua para la fecha, primeros de septiembre.
El agua está fría, pero no congelada, si te quieres meter lleva escarpines, tiene piedras y resbala.
Se puede ver algún pez, y el la cueva ( que no se puede entrar) muchas palomas.
Tiene parking de acceso que cuesta un euro.

Marta L.

Es un sitio ideal para pasar unas vacaciones y desconectar de todo, si tienes mascotas lo van a disfrutar un montón ya que es un sitio muy seguro. No hay contaminación y el agua está cristalina.

Ludy D.

Hay que llegar por la carretera de Benaojan-Ronda. Hay un parking para dejar el coche que es de pago. Después, un camino te baja hasta el puente que te lleva a la cueva del gato.
Hemos ido en domingo y llegamos sobre las 12. Había bastante gente. Es un paraje natural muy bonito y el agua está muy muy fría. La cueva en sí no se puede visitar, ya que dentro viven murciélagos que están protegidos, Lo deja claro el cartel de prohibido el paso. Pero hay gente que hace caso omiso. Hay gente que se lleva sus mesas y sillas para pasar allí el día.
El paisaje es precioso y la experiencia de bañarte en ese agua tan fría hay que vivirla, pero no le doy las 5 estrellas por la basura que evidentemente dejan allí los visitantes: latas, colillas.... Una pena. Hay que ser consecuente y llevarte la basura que generas.
Hemos ido con niños y les ha encantado.

Pablo T.

La cueva del gato en Benaoján es un lugar que, aunque no muy conocido, ¡vale completamente la pena visitar! Desde que llegas, te recibe un ambiente de paz que te invita a explorar. Al adentrarte, te verás rodeado de estalactitas y estalagmitas que parecen sacadas de otra época. El paseo por la cueva es emocionante; cada rincón tiene su propia historia que contar.

El camino está bien señalizado y hay guías que te cuentan anécdotas interesantes sobre la cueva y su fauna. ¡No te olvides de llevar tu cámara! La iluminación es genial para captar esas formaciones tan impresionantes. Además, el aire fresco del interior es un alivio si vas en un día caluroso.

Después de la visita, puedes disfrutar del entorno natural que rodea Benaoján, perfecto para hacer una ruta de senderismo. Hay mucho que descubrir en esta pequeña joya. Si buscas un plan diferente y te encanta la naturaleza, no dudes en visitar la cueva del gato. ¡Te aseguro que no te arrepentirás!

Moreno

Lugar muy bonito. Cuenta con un parking a escasos metros (es cierto que tiene una pendiente algo inclinada). Hay que llevar una moneda de 1 euro, si no no abre la barrera.
El agua muy fresca, la verdad que muy rica si te gusta el agua a niveles de glaciar como es mi caso. Las fotos espectaculares.

Aconsejable ir temprano y llevar algo de comer y beber: Hay bastante sombra, LOD RESIDUOS LLEVARLOS DE VUELTA. Cuidemos el lugar.